El Presidente de la CARM reivindica en su discurso por el dia de la region los valores de esta tierra y de sus gentes.
Ha realizado un discurso donde destaca el esfuerzoi y la aportacion de la region de Murcia al desarrollo de nuestro Pais.
Hoy les voy a hablar de futuro, de orgullo, de talento y de conocimiento; de experiencia, de ilusión, de oportunidades y de impulso.
Les voy a hablar, en definitiva, de la Región de Murcia.
Hoy, 9 de junio, es un día para reivindicar nuestros valores, nuestra contribución al desarrollo de España, nuestra nación, a la que los murcianos estamos orgullosos de pertenecer.
El 9 de junio debe ser más que un día festivo en el calendario, y más que un acto institucional.
El Día de la Región de Murcia nos pertenece a todos. A las instituciones, sí; pero también a los trabajadores, a los agricultores, a los profesionales. Es hoy el día de los empresarios, de los autónomos y de los estudiantes. De quienes siguen buscando una oportunidad. De hombres y de mujeres por igual. De mayores y de jóvenes, sin diferencia.
Todos tenemos la responsabilidad de trazar un camino mejor hacia el futuro. De tomar juntos las mejores decisiones y establecer las prioridades que nos marcamos en ese trayecto.
Decía experiencia. Y es que, a lo largo de casi cuatro décadas – desde la aprobación de nuestro Estatuto de Autonomía-, el trabajo de muchos hombres y mujeres nos ha permitido reafirmar nuestra identidad política, social y cultural. Ellos nos han traído hasta aquí.
Aprobar el Estatuto–hace ya 36 años- fue tan solo la base para comenzar a recorrer un camino hacia el bienestar, hacia la consolidación de los derechos, hacia la igualdad real.
Son logros que hoy tenemos más cerca y por los que debemos seguir trabajando sin descanso alguno.
Hablaba también de excelencia, de talento, y conocimiento, que hoy reconocemos con la entrega de las Medallas de Oro, los Diplomas de Servicios Distinguidos y la Corbata de Honor a personas e instituciones que se han hecho acreedoras de nuestra admiración y sobre todo gratitud.
Contamos con unos valores que nos han enseñado nuestros mayores, que hemos vivido en nuestras familias. Contamos con el ejemplo de muchos murcianos y de muchas murcianas. Y necesitamos su contribución más que nunca, porque la Región que construyamos a partir de ahora no va a excluir a nadie y necesita de todos.
Debemos aportar ilusión a este proyecto común que es la Región de Murcia. Trabajar con vehemencia. Contribuir en cada paso a construir una realidad mejor. Más solidaria. Más justa para todos. Porque no vamos a dejar atrás a nadie.
Premiadas y premiados, señoras y señores,
Los últimos días han sido especialmente convulsos. Han surgido dudas, incertidumbres, preocupaciones legítimas por lo conseguido en los últimos años, y las perspectivas que teníamos de lo que estaba por llegar.
Un cambio legítimo, democrático, pero que no está exento de generar inquietud dado que la mayoría parlamentaria del nuevo Gobierno depende de fuerzas políticas
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populistas o de aquellas que tienen como objetivo la ruptura de España y el debilitamiento del modelo del 78.
En este nuevo contexto, la Región de Murcia no puede permitirse esperar ni un minuto, no puede desaprovechar ninguna oportunidad. Es mucho lo que nos jugamos en temas clave para nuestros ciudadanos.
Exigimos respuestas y ofrecemos lealtad... Lealtad para avanzar, no para retroceder.
Tendemos la mano al nuevo Gobierno de España. Y esperamos y merecemos una respuesta a cuestiones imprescindibles para el devenir de nuestra comunidad como son el agua, las infraestructuras y la financiación autonómica.
En nuestra democracia, las autonomías debemos ser parte de la solución, pero muchos las han convertido en parte del problema.
Las autonomías tenemos una enorme responsabilidad en la gestión de los servicios esenciales: la Sanidad, la Educación, la Atención Social.
No olvidemos que el grado de cohesión en un estado descentralizado como el nuestro, exige lealtad y reciprocidad entre territorios, evitando que el desarrollo de unos se haga a costa de otros.
Lealtad y reciprocidad que se encuentra expresamente recogida en la Constitución en forma del principio de solidaridad interterritorial.
Así es respetable e incluso deseable, que en la búsqueda de soluciones razonables para todos, cada uno legítimamente defienda el desarrollo de su comunidad, pero sin dañar o lesionar a los otros. Porque los otros también son España.
Por eso, es necesaria una visión global, la del Estado, que haga prevalecer los derechos comunes de todos los españoles: la igualdad, la libertad, la seguridad, la justicia.
Su función es garantizar, desde el respeto escrupuloso a la diversidad, la cohesión de la nación española.
Para ello hay cuestiones que deben ser abordadas en conjunto para evitar más diferencias entre los españoles.
La igualdad es del todo innegociable.
Y en la Región de Murcia, esa igualdad pasa por una justa financiación, por una política solidaria en la gestión del agua y por no poner freno a las infraestructuras ya comprometidas.
Para cumplir esos compromisos, para avanzar en la igualdad, pueden contar con nosotros.
Hoy la sociedad nos pide que busquemos consensos, acuerdos y diálogo. La fragmentación política no puede hacernos perder la perspectiva sobre la España en la que vivimos.
Yo desde luego soy muy consciente de la Región de Murcia que gobierno.
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Esta nueva forma de hacer política exige tener en cuenta las aspiraciones del adversario y, a cambio, alcanzar consensos para que las medidas y las reformas perduren más en el tiempo.
Alcalde, presidenta de la Asamblea, amigos,
Hoy proclamamos nuestra satisfacción por vivir en una Región que cuenta con un patrimonio material incomparable, pero también con un patrimonio inmaterial del que nos sentimos tremendamente orgullosos.
Con gente maravillosa, comprometida, trabajadora, humilde y capaz de lo mejor.
Personas e instituciones ejemplares, como quienes hoy han recibido las Medallas de Oro de la Región de Murcia, a las que felicito en nombre de todos por una labor ejemplar, por su compromiso y su excelencia.
Felicidades a la Confederación Regional de Organizaciones Empresariales de Murcia (CROEM), protagonista indiscutible de la recuperación que hemos vivido estos años y de la gran proyección que tenemos ante nosotros.
Al Conservatorio Superior de Música ‘Manuel Massotti Littel’ por su aportación –ya centenaria- a la cultura, a la formación de nuevas generaciones de murcianos y al fortalecimiento de nuestro amplio patrimonio musical y cultural.
A la Hospitalidad Murciana de Nuestra Señora de Lourdes, todo un símbolo de solidaridad, de atención a quien más lo precisa, de esperanza y convicción para hacer una sociedad mejor. Porque sólo desde los valores es posible lograrlo.
A la ONCE, cuyo compromiso ha hecho posible que miles de murcianos encuentren en sus capacidades una fortaleza en lugar de un freno en su desarrollo personal.
Al Tío Juan Rita, don Juan Tudela Piernas, centenario ejemplo de buen hacer. Testigo y protagonista de cuanto hemos vivido como Región. Un buen hombre que contagia sabiduría y apego por una cultura y una tierra que hoy le reconoce con su máxima distinción.
Y a Pablo González-Conejero Hilla, emprendedor, creativo y profesional que representa la excelencia de la que nos enorgullecemos en esta tierra. Su reconocimiento más allá de nuestras fronteras es, además de justo, un espejo en el que estoy completamente seguro que muchos se miran para –en cualquier ámbito profesional- lograr unos objetivos que sé que en su caso van aún más allá de los hasta ahora logrados, aun siendo mucho lo obtenido hasta el momento.
Enhorabuena a los seis, como también a quienes han recogido hoy el Diploma de Servicios Distinguidos a la Comunidad Autónoma.
Al Consejo Jurídico de la Región de Murcia, que en sus dos décadas de existencia ha aportado mucho más que sus dictámenes al buen hacer de las instituciones. Ha sido –y es- un ejemplo de murcianía, de profesionalidad y excelencia.
Felicidades también a Antonio Muñoz Beraza, quien al frente de su empresa, AMC, ha protagonizado una verdadera transformación tecnológica, de innovación e internacionalización, que es referente y motivo de orgullo y admiración para todos los murcianos.
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Enhorabuena también a Juan García Lax, cuya trayectoria es digna de ser estudiada en todos los ámbitos.
Su profesionalidad, su visión empresarial, su capacidad de avanzar hasta situarse al frente de un sector tan importante para la Región de Murcia como es el hortofrutícola, merece nuestro reconocimiento y nuestra admiración.
Felicidades a una deportista que es ejemplo de esos valores incuestionables del deporte: la capacidad de trabajo, el esfuerzo, la superación, la ambición de llegar más alto, más lejos, más fuerte, la lorquina Úrsula Ruiz Mirete.
Y a quien al frente de la Asociación Española contra el Cáncer en la Región de Murcia, como en otros muchos ámbitos en que ha demostrado siempre su profesionalidad y compromiso con la Región, ha recibido también el Diploma de Servicios Distinguidos, nuestra admiración, gratitud y nuestro aplauso, el Doctor Agustín Navarrete Montoya.
Junto a todo ellos también hemos entregado este año una Corbata de Honor con la que honrar nuestra bandera; porque aquella que preside los más importantes actos de la Academia General del Aire, institución murciana por excelencia y orgullo de las academias militares de todo el mundo, es la bandera de España y, lógicamente, también la nuestra.
Es una manera de reconocer no sólo a la Academia por su 75 aniversario como centro de formación aeronáutica y universitaria del máximo nivel internacional, sino, además, la profunda expresión de nuestra gratitud, la de toda la Región de Murcia, con la labor que a diario desempeñan nuestras Fuerzas Armadas para defender la integridad territorial de España y los derechos y libertades de todos los españoles, que cuenta con toda nuestra admiración y apoyo.
Todos estos premiados son sin duda una muestra excelente de lo que hoy es la Región de Murcia. Contribuyen con su trabajo y esfuerzo al orgullo que hoy sentimos como ciudadanos de esta gran región.
Del enorme potencial con que contamos para seguir avanzando juntos.
Gracias a vuestra labor, a vuestro trabajo y sacrificio, la Región de Murcia es hoy sinónimo de futuro y de modernidad.
Compartimos con vosotros la ilusión de construir un espacio más justo y mejor para nuestros hijos.
Para ello debemos ser capaces de implicar a toda nuestra sociedad. Ser capaces de anticiparnos y llevar la iniciativa.
Porque, 36 años después de la aprobación del Estatuto, estamos ante un periodo histórico lleno de oportunidades.
Un periodo que en los próximos meses, si no se ponen obstáculos, puede ver cómo llega la Alta Velocidad a nuestra región, cómo se abre el Aeropuerto Internacional, o cómo culminamos un Pacto Nacional del Agua, que estaba avanzado y que deberá conectar las cuencas de nuestro país.
Un pacto que nos refrendará como una sociedad solidaria, justa, equitativa… moderna, en definitiva.
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Porque una nación en la que sus comunidades no son capaces de compartir el agua que les sobra, en la que se prefiere verter el agua sobrante al mar antes que compartirla con sus paisanos es una nación gravemente herida.
Nosotros, desde la Región de Murcia, ya hemos dado el primer paso con un acuerdo histórico que deberá ser la base para esa solución definitiva.
La reforma del sistema de financiación autonómica es igualmente inaplazable y crucial para la Región de Murcia.
Es el momento de aunar voluntades, de sumar y no dividir. Todos, Gobierno regional, partidos políticos y sociedad civil debemos trabajar juntos para conseguir acordar con el Gobierno de España un modelo justo y suficiente, como hasta la fecha lo veníamos haciendo.
Por ello, una de mis prioridades como Presidente es la aprobación de un nuevo sistema que proporcione a los murcianos una financiación igual que la del resto de los españoles, que les permita recibir unos servicios públicos de calidad, sin acudir al déficit y al incremento de la deuda.
Un nuevo modelo, que ponga en el centro a las personas, por encima de los territorios y los signos políticos de los gobiernos.
Desde luego, los ciudadanos de esta Región no entenderían que se permitiera mantener la injusta situación actual que padecen, y yo como Presidente voy a poner todo mi empeño en evitarlo.
Si las infraestructuras son las arterias por las que fluyen las oportunidades este año la Región de Murcia debería tener más vida que nunca.
Amigas y amigos,
No hay límites en nuestra capacidad. Y no permitiremos que nadie los ponga en nuestro desarrollo.
Debemos incidir en atajar sin demora cualquier síntoma de falta de solidaridad.
Debemos frenar el enfrentamiento y rencor entre vecinos, como consecuencia evidente de la proliferación de regionalismos y nacionalismos que prefieren rasgar la piel de toro antes que compartirla.
Regionalismos y nacionalismos que surgen del patriotismo de salón que demuestran algunos dirigentes políticos.
La unidad de España no es un concepto simbólico.
No basta con envolverse en la bandera. Tampoco se solucionan las cosas cambiando algunas palabras para definir el modelo de las autonomías de España y con esto todo resuelto.
Quizás este sea el principal problema que tenemos hoy día. Se nos llena la boca hablando de la unidad de España, pero, desgraciadamente, son demasiados los que no pasan de ahí.
El mayor problema al que pueden enfrentarse un país es el de la integridad territorial.
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La unidad de España es la expresión de la tradición de un pueblo que lleva unido más de quinientos años, la nación más antigua de Europa.
Es la expresión de la convicción solidaria de que juntos podemos llegar más lejos en la mejora de nuestro bienestar. Es la expresión del aprovechamiento común de los recursos comunes para generar un desarrollo social que llegue a todos los rincones.
La unidad de España tiene proyecciones muy concretas como son el ejército, el agua, las infraestructuras, la energía, la seguridad, la educación, la sanidad o la representación de los intereses ante las instituciones supranacionales.
Pienso en este momento en los murcianos que viven en esta tierra, y también aquellos que viven en Cataluña, que se sienten orgullosos de su origen. O los catalanes que viven en nuestra Región.
Unos y otros se alegran de ser españoles y de compartir una historia común que no puede ser reinventada ni despreciada por quienes estos últimos meses han provocado el mayor desafío, el mayor problema de España en los últimos 40 años.
No merecemos esto. Y no lo vamos a consentir.
Hasta ahora el Gobierno de España ha actuado con moderación, con prudencia, pero también con firmeza.
Porque nos asiste la razón, porque la ley protege al Estado de Derecho y, lo más importante, es una garantía de presente y futuro para todos los españoles.
Confiamos en que se siga demostrando templanza y seguridad para que todos sigamos siendo iguales, para que nadie ponga en riesgo el bienestar de las personas y la unidad de España.
La Región de Murcia ha tenido siempre un comportamiento intachable en la defensa y la preservación de nuestra nación.
Los murcianos hemos sabido salir adelante a pesar de las dificultades y contribuimos al desarrollo de España como el que más.
Presidenta de la Asamblea, alcalde, señoras y señores,
Somos una Comunidad dinámica. Tenemos el segmento de población joven más amplio de toda España.
Tenemos una posición estratégica y privilegiada en el Mediterráneo.
Tenemos sectores, dinamismo, emprendimiento y hemos hecho bien las cosas para llegar a este punto con tantas oportunidades como el que más.
Tenemos verdadero orgullo de Región.
Tenemos mucho que ofrecer a nuestro país y lo seguiremos haciendo bien como hasta ahora, para lo que es capital que España salde deudas pendientes con la Región de Murcia.
El diálogo es, sin ninguna duda, la única vía para alcanzar nuestros objetivos.
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Nosotros estamos dispuestos a dialogar con el nuevo Gobierno como lo estábamos con el pasado.
Pero el diálogo no es un fin en sí mismo, ni puede realizarse sin unas premisas de partida como las que he expresado anteriormente.
Por eso, quiero aprovechar la oportunidad inmejorable que brinda la celebración del día de nuestra región para dejar clara una cosa.
No vamos a dar marcha atrás ni en una sola de las reivindicaciones para mejorar la calidad de vida y el bienestar de todos y cada uno de los habitantes de esta Región.
Desde el Gobierno de la Región de Murcia, seguiremos trabajando, como lo hemos hecho hasta ahora, para que nuestra comunidad autónoma siga siendo una parte importante del desarrollo de España.
Para seguir avanzando, sin permitir en ningún momento un paso atrás.
También desde Alcantarilla, historia viva de la Región de Murcia, ciudad a la que agradezco su acogida, agradecimiento que transmito personalmente a su alcalde, Joaquín Buendía, y a todos cuantos hoy nos han recibido con los brazos abiertos, os animo a seguir construyendo más y mejor Región. Sólo así construiremos más y mejor España.
Os animo a ser capaces de imaginar lo mejor y a hacerlo posible.
Estoy orgulloso de ser español. Amo la Región de Murcia. Amo cada rincón de esta región, cada rincón de cada municipio, de cada pedanía, de cada diputación, de cada paraje por pequeño y alejado que sea, y admiro a sus gentes.
Admiro a sus gentes por lo que han hecho y por lo que están haciendo, y creo que no hay mejor día que hoy para reafirmar mi compromiso con todos y cada uno de ellos. Mi compromiso para trabajar, para dar lo mejor de mí, para hacer que la Región de Murcia cada día sea mejor, para hacer que el millón y medio de murcianos se sientan orgullosos de serlo, para hacer que todos amen la Región de Murcia como yo la amo.
Feliz día de la mejor tierra del mundo, feliz Día de la Región de Murcia.
Muchas gracias.
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